No olvidemos a quienes desde la infancia cargan el pesado yugo de la discriminación. Su vida al ras de la tierra, pasa desapercibida por nuestra vista.

Nota Informativa | La Montaña: entre la resistencia y los proyectos de muerte

Santa Cruz el Rincón, 21 de julio de 2018. En el marco del XXIX Foro Informativo, Por la Defensa del Territorio llevada a cabo en la comunidad de Santa Cruz del Rincón, municipio de Malinaltepec, el Consejo de Autoridades Agrarias en Defensa del Territorio (CRAADT), de la Montaña y Costa Chica, señaló riegos ante nuevas solicitudes de concesiones mineras en Guerrero. También instaron al gobierno en transición para que tome en cuenta en su agenda de trabajo la cancelación de concesiones mineras y la reserva de la biosfera del territorio comunitario.

Las nuevas solicitudes de concesiones que están solicitando para la región y el estado de Guerrero son alarmantes. Hasta hace un año el CRAADT ha llevado una lucha y ha tenido logros como el caso de San Miguel del Progreso al cancelar la concesión más grande con 45 mil hectáreas de nombre Corazón de Tinieblas. Esta concesión cancelada benefició a 12 núcleos agrarios, entre ellos está Colombia de Guadalupe, Paraje Montero, Tierra Colorada, Tilapa, Tenamazapa recién incorporado al Consejo, Totomixtlahuaca que no está integrado al CRAADT y Malinaltepec, sólo por mencionar algunos.

Con el tiempo, de 44 concesiones en la Montaña, 22 siguen vigentes y 22 han sido canceladas, sin embargo la amenaza está latente precisamente porque puede haber solicitudes de permisos para nuevas concesiones, es el caso del Ejido de Zitlaltepec que estaba la vieja mina de San Javier que se encuentra en el lindero entre Paraje Montero, Iliatenco, el Cerro Borracho y Zitlaltepec, mina que se había cancelado, pero el territorio sigue siendo amenazado por los nuevos permisos de concesiones.

Un foco rojo vuelve a la Montaña y Costa Chica de Guerrero frente a las nuevas solicitudes de concesiones mineras. Es alarmante que los proyectos de muerte insistan una y otra vez para reducir los cerros sagrados a polvo, devastando la vida animal, la naturaleza y misma vida humana, aun cuando desde tiempos inmemoriales las comunidades han defendido y cuidado su territorio.

De acuerdo con datos del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, en el estado de Guerrero, principalmente en la Montaña hay 17 solicitudes vigentes de concesiones mineras en los núcleos agrarios de la región. Preocupa una de las empresas que está solicitando permiso de minería, la concesión lleva el nombre de Don Julio Fracción 1 que mide 550 mil hectáreas (inicia en Tlacoapa y termina en el municipio de Iguala), sólo la región de la Montaña tiene 700 mil hectáreas, esta concesión equivale a más de la mitad del territorio de la Montaña. Hasta el momento no ha sido aprobada esta solicitud de minería. Quien sea que este solicitando este permiso debe de tener millones de pesos para pagar anualmente el permiso y poder sostenerlo. Otra solicitud de concesión es la que se llama 7 leguas fracción 1, con 169 mil 500 hectáreas, estaría afectando el municipio de Atlixtac.

Todas las concesiones que se han ido cancelando vuelven a amenazar cuando menos se espera, por ejemplo la concesión San Gabriel, que estaba en el Ejido de Zitlaltepec, ahora lo está solicitando una nueva empresa, pero ahora es solo una concesión que se llama Mano de Paz fracción 1, es una solicitud que abarca Zitlaltepec, sube a Atlamajalcingo del Monte y toma el rumbo a Tlacoapa, es una concesión que mide 38 mil hectáreas y que además no entra en la concesión que era de Corazón de Tinieblas ya que hay una declaratoria de libertad de terreno, una suspensión de plano y hay una sentencia a favor de San Miguel del Progreso en la cual menciona que tanto el gobierno como la Secretaría de Economía que quiera otorgar una nueva concesión minera, al menos en el territorio de San Miguel del Progreso, tendría que realizar una consulta a la comunidad, esto frena a empresas que puedan solicitar una nueva concesión, por eso la concesión Don Julio ni siquiera entra, sólo rodea lo que era Corazón de Tinieblas.

La solicitud de concesión minera, Olinalá Fracción B, es un proyecto de 39 mil hectáreas, y Olinalá Fracción A es una solicitud de concesión de 81 mil 400 hectáreas.

Las concesiones mineras vigentes que están amenazando es Toro Rojo, una concesión de 8 mil hectáreas y la concesión San Gabriel o la Diana que es una concesión de 16 mil hectáreas que afecta Zitlaltepec, Iliatenco y los núcleos agrarios vecinos; una concesión en el estado de Oaxaca, que abarca parte del estado de Guerrero, particularmente en el municipio de Tlacoachistlahuaca está con estatus de vigente. Las concesiones hasta el momento canceladas, en este caso son: Corazón de Tinieblas, Goliat 5 fracción 4 y 3, y Goliat 5 Fracción 1 que se encuentra en Pueblo Hidalgo. En Marquelia se encuentran otros más pequeños. Las concesiones que están en estado de explotación en Guerrero tenemos Carrizalillo, municipio de Eduardo Neri y Media Luna, en el municipio de Cocula, que pertenece a la Torex Gold, empresa de origen canadiense.

Cabe destacar que en Guerrero se tenían “un millón de hectáreas concesionadas, con las nuevas solicitudes tenemos poco más de 2 millones, es decir, pasaremos de un millón a 3 millones de hectáreas de territorio concesionado en Guerrero. Pareciera que hay una política de incentivación de la apropiación del territorio a pesar de que nos estamos defendiendo, sin embargo acá los tenemos detenidos”, sentencia Miguel Mijangos de la Red Mexicana de Afectados por la Minería (REMA).

Desde hace seis años que surge el Consejo de Autoridades Agrarias y cinco años de realizar foros con más de 25 núcleos agrarios que la integran, se han organizado para impedir que entren los proyectos de minería en la región. La resistencia ante la embestida de proyectos de minería se ha enfrentado a través de las “asambleas de rechazo a la minería, las actas de rechazo a la minería, después se realizaron los estatutos comunales y los reglamentos; más de 12 núcleos agrarios han modificado e inscritos sus nuevos estatutos y reglamentos comunitarios donde prohíben la minería. En un principio Zapotitlán Tablas, Zitlaltepec y San Miguel del Progreso inscribieron sus actas al Registro Agrario Nacional (RAN), sólo San Miguel del Progreso logró una sentencia de cancelación de la concesión más grande de la región”, detalló Armando Galeana, integrante de Tlachinollan.

Armando Campos, quien colabora con la REMA, afirmó que se “necesita conseguir trabajando en la organización, más allá de las miles concesiones que van a seguir solicitando y que se van a seguir cancelando, al final seguimos trabajando sobre candados que impidan que entren estos proyectos más allá de que den concesión de 1 millón de hectáreas, de 500 o de tres hectáreas aquí la consigna es trabajar con los núcleos agrarios y seguir blindando los núcleos a partir de sus instrumentos jurídicos propios, estatutos, actas, actas de asamblea de cabildo abierto que solo tiene Malinaltepec e Iliatenco, son los únicos municipios del estado de Guerrero que tienen actas de Asamblea de cabildo abierto”.

Las autoridades agrarias continúan discutiendo para blindar sus territorios ante cualquier amenaza, una de las mujeres reveló con exactitud sus luchas, las mujeres y los hombres siempre hemos sido de batallas y estamos en unión con la tierra, así mismo señaló que ante el gobierno de transición exigen la cancelación de los proyectos extractivos y la reserva de la biosfera ya que trae consigo un daño catastrófico e irreversible a la naturaleza y a la salud de quienes conviven con ella. Nos declaramos territorio libre de minería.

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