La justicia no llega para Jorge Alexis y Gabriel

Chilpancingo, Guerrero, a 12 de diciembre del 2025. En memoria de los normalistas asesinados, Jorge Alexis Herrera Pino y Gabriel Echeverría de Jesús, estudiantes normalistas, madres y padres de los 43 y colectivos de desaparecidos realizaron una marcha para exigir justicia a 14 años de su asesinato por parte de policías estatales en la autopista México-Acapulco, a la altura del Parador del Marqués.

La marcha comenzó a las 12 del día en la glorieta del Caballito. El contingente de más de un centenar de manifestantes marchó sobre las principales avenidas de la capital del estado denunciando los hechos violentos del 12 de diciembre del 2011. A la altura del antimonumento +43 se detuvieron para hacer un pase de lista de los estudiantes desaparecidos en el 2014.

El recorrido llegó hasta el Parador del Marqués, donde los autobuses de los normalistas bloquearon el paso y establecieron un mitin. Isidoro Vicario, abogado del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, recordó que además de los dos estudiantes asesinados, más de 28 jóvenes fueron detenidos y seis de ellos torturados. “No hay ningún responsable del asesinato de los compañeros de aquel día. Por eso es propicio recordar y honrar los nombres de los compañeros que cayeron en este lugar, y que no se nos olvide que por la sangre que han derramado, nosotros nos encontramos obligados a seguir levantando la voz, a seguir exigiendo justicia para que estos casos de lesa humanidad no queden en la impunidad, porque tres años después también desaparecieron a 43 estudiantes que todavía no sabemos dónde están, y tres más fueron asesinados”.

“Que las autoridades del Estado mexicano sepan que el pueblo no quedará tranquilo y que no callará para seguir pidiendo justicia. Estos graves casos no debemos permitir que queden en la impunidad, porque es lamentable que después de los hechos del 2011, detuvieron y procesaron a dos responsables, pero poco duró el gusto de los familiares, y de todos nosotros por encontrar justicia”, señaló el abogado.

El integrante del colectivo de desaparecidos Lupita Rodríguez. David Molina habló de Lucio Cabañas, quien fue maestro normalista, “hace exactamente 51 años, escribía y decía en una carta porque había sido removido de su escuela, donde daba clases en Atoyac de Álvarez. Decía en su carta, en la parte fundamental, ‘queremos que sepan que admiramos su decisión y dignidad ante este problema, porque los padres están dando la elección de valor a sus hijos, porque les están enseñando con la acción que los hombres y mujeres honrados no deben permanecer callados ni cruzados de brazos ante la injusticia y la opresión’. Magnífica lección a la juventud y el pueblo todo. Firman Serafín Núñez Ramos y Lucio Cabañas Barrientos”.

“Hoy los padres de los normalistas también nos dan una lección importante de gallardía, y les decimos, que este gobierno nos podrá ver cansados a los colectivos. Este gobierno nos podrá ver tristes porque no encontramos a nuestros familiares. El gobierno de Evelyn Salgado no quiere hacer un decreto para que la comisión de búsqueda sea un OPD. Nos va a ver llorar, pero nunca, nunca nos verá de rodillas”, exclamó eufórico y lágrimas en los ojos David Molina.

Algunas normales rurales de otros estados se unieron a la protesta denunciando las represiones que han sufrido por parte de las autoridades mexicanas. Cuestionaron sus acciones contra “estudiantes de comunidades campesinas”, como el asesinato de los dos estudiantes y el caso de la desaparición de los 43 normalistas. Las críticas de los integrantes de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (FECSM) fueron para el gobierno de Ángel Aguirre Rivero, quien gobernaba el estado cuando los dos jóvenes fueron asesinados y cuando desaparecieron a los 43. También criticaron que el gobierno de la cuarta transformación llegó al poder con promesas de justicia y hasta el momento se ha mantenido la impunidad.

“Cada año seguimos en la misma realidad, el gobierno corrupto asesina estudiantes de zonas marginadas que sólo buscan un bien para México. Los dos compañeros salieron a protestar no por ellos, sino para mejorar la educación, porque para eso son las normales rurales, para llevar la educación a los pueblos más alejados y marginados donde no hay justicia, pero el gobierno los calló”, señaló uno de los normalistas recordando que el día bloquearon la carretera porque pedían una audiencia con Ángel Aguirre para pedir que la matrícula se ampliara, becas de alimentación y cedieran más plazas.

Las normalistas de Teteles, Puebla, integrantes de la FECSM, mencionaron que las autoridades mexicanas reprimen a los estudiantes, “en cambio, un delincuente anda por las calles como si nada, el gobierno prefiere al delincuente que al estudiante que estará impartiendo clases”.

A un costado del mitin permenecian dos estudiantes sosteniendo las dos cajas de rojo y negro de Jorge Alexis y Gabriel Echeverría, mientras rememoraban el día en que policías estatales abrieron fuego sin miramientos contra los estudiantes y dos cayeron muertos por las balas.

Como acto simbólico, frente a las estelas de los normalistas caídos, en el asfalto dejaron caer tres monigotes que representan la infamia: Ángel Aguirre Rivero, Enrique Peña Nieto y Murillo Karam y después les prendieron fuego sobre la autopista del sol, donde corrió la sangre de Jorge Alexis y Gabriel, sobre todo para recordar que a 14 años no hay justicia.